Según el sondeo de las últimas encuestas, el alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio lidera la preferencia electoral en Lima y provincias seguido de Keiko Fujimori, Ollanta Humala y Alejandro Toledo y Lourdes Flores Nano. Si bien falta poco más de un año para las elecciones presidenciales y cualquier cosa puede suceder en el camino, me aventuro a especular con algunos posibles escenario para una eventual segunda vuelta el 2011. Antes de ello, comentaré mis impresiones acerca de Luis Castañeda Lossio, quien parece configurarse como el nuevo outsider, término que viene captando el interés de muchos analistas políticos que se desvelan por saber quién emergerá como el candidato sorpresa para el próximo año.
Castañeda posee un perfil político diferente al de sus competidores. Se trata de un candidato que destaca por su perfil bajo ante los medios de comunicación y por ser un eficiente administrador en la gestión municipal. Como resultado de ello, las encuestas de aprobación no le han dado menos de 70% en todo lo que va de su gobierno, cifra que muchos políticos, comenzando por el Presidente de la República, quisieran tener. Sin embargo, lo que muchos analistas y simpatizantes ven en Castañeda como una virtud, a mí me parece, más bien una peligrosa señal. La actitud pragmática, es decir el presentarse como un ejecutor, un hombre de pocas palabras que declara poco y exhibe como prueba los resultados concretos de su gestión, no nos permite esclarecer cuán dialogante es o será cuando tenga que enfrentar críticas a su gestión. Parecer ser que Castañeda eludió el diálogo fluido con los medios de comunicación en casos como el Metropolitano o el litigio con la Universidad San Marcos por el puente que invade parte de su campus amparado en la aceptación que goza su gestión en la población limeña. Es como si nos dijera "mis obras hablan, yo no necesito hacerlo", "la gente lo aprueba, ello es suficiente". Y cuando un gobernante tiene la certeza de que la población lo apoya sin chistar, suele sentir que tiene carta blanca para todo y que no tiene que rendir cuentas.
De otra parte, debido a lo anterior, es un candidato que, en mi opinión, resulta muy permeable de caer en la tentación autoritaria-democrática, o sea, acceder al poder mediante elecciones, pero una vez en él, actuar de manera autoritaria. Y no me refiero a un autoritarismo del tipo chavista, sino a un autoritarismo descafeinado, sutil, populista, con la bendición del sector empresarial y banquero, y de las fuerzas políticas que no quieren desmantelar la corrupción fujimontesinista y que tampoco desean continuar con la transición democrática en lo que a derechos humanos y reparaciones a los damnificados por la violencia armada se refiere. Por ello, tengo la impresión que el fujimorismo, el APRA y la derecha estarán a la expectativa de apoyar a algún independiente o outsider cuyo perfil los satisfaga para la consecución de sus propios intereses; y ese es, a mi modo de ver, Castañeda Lossio.
Pero ¿qué tiene Castañeda que lo haga atractivo para el APRA, el fujimorismo y la derecha? Su pragmatismo es muy similar al de Fujimori: no habla mucho, pero actua; es eficiente y habla con resultados; no tiene un pasado político desgastado como sus competidores; goza del reconocimiento y la aprobación de la población limeña. En consecuencia, la viabilidad de sus proyectos encontrarían muy poca resistencia, lo cual, aunado a todo lo anterior, crearía un clima de confianza propicio para que empresarios e industriales se sientan cómodos (verían a Castañeda con mucho agrado, ya que garantizaría el status quo. Todo esto lo hace muy permeable al discurso conservador y al neopopulismo.
Segunda vuelta 2011
Castañeda vs. Toledo
Esta eventual segunda vuelta presentaría las siguientes características. El peligro es que Castañeda se vería obligado a negociar el apoyo del APRA, la derecha y el fujimorismo para ganar y cogobernar con ellos, de manera que así les devolvería el favor. En este momento, sería clave la participación de los movimientos regionales y del Partido Nacionalista que posee vínculos importantes con ellos. De darse una alianza abierta o encubierta entre Castañeda y la aprofujiderecha, el continuismo quedaría asegurado: retroceso en los procesos judiciales anticorrupción y en la investigación de casos ocurridos durante la gestión aprista; también, retroceso en la aplicación de las recomendaciones de la CVR y en el modelo económico.
En ese momento, recién conoceríamos la conducta política y moral de Castañeda, de lo que sería capaz de hacer: competir con sus propios recursos y rechazar el apoyo del aprofujiderechismo o recibir su apoyo con tal de ganar la presidencia. Si sigue la lógica pragmática de costo-beneficio que le ha dado resultados hasta ahora -que es lo más probable- pactará con quienes hoy gobiernan. Frente a esta posibilidad, se requeriría de una gran coalición de fuerzas políticas para apoyar a Alejandro Toledo con la finalidad de cerrarle el paso al APRA y al fujimorismo y a todo lo que ellos entrañan.
Castañeda vs. Keiko
Aunque parezca extraño, puede ser el escenario más conveniente, porque obligaría a Castañeda a apoyarse en fuerzas menos nefastas que las anteriores, sobre todo de centroizquierda, movimientos regionales y el nacionalismo, lo cual lo alejaría saludablemente del APRA y el fujimorismo, y desaparecería la posibilidad de que termine engullido por ellos y con ella la tentación autoritaria-democrática.
Keiko es una candidata muy vulnerable. No sería difícil para Castañeda demoler a Keiko en un debate. En una eventual segunda vuelta, los aliados de Castañeda lo harían muy gustosos durante la campaña.
El oportunismo aprista, con el olfato que caracteriza a su líder, podría abandonar su alianza estratégica con el APRA y buscar reacomodarse con los nuevos tiempos. No nos extrañe que, llegado el momento, Alan García comience a echar mano de la persecución que fue víctima cuando tuvo que salir del país, de los DDHH, el IF CVR y de todos aquellos temas que sirvan para demostrar que nada lo une al fujimorismo. Lo haría para al menos asegurar alguna cuota de participación en el poder.
Castañeda vs. Humala
En este caso, el más beneficiado sería Humala si es que entre Solidaridad y el aprofujimorismo se consuma y se hace evidente para el electorado. Humala sería visto como el único candidato que impediría el retorno de los enemigos de la democracia y de los corruptos. Las fuerzas políticas de centro, algunas a regañadientes, le darían su apoyo condicionado a que Humala se comprometa a respetar el orden constitucional y que no permite que el Perú ingrese a la órbita chavista. La duda es si Humala podrá resistir la presión chavista (aunque para ese momento, el gobierno de Hugo Chávez se encontrará debilitado por la crisis económica que atraviesa Venezuela, la cual tiende a agravarse).
Si Humala no hace un enorme y evidente esfuerzo por desmarcarse del chavismo y el radicalismo etnocacerista, Castañeda podría ser visto como el candidato que impedirá el ingreso del socialismo chavista en el Perú (ya estoy visualizando los spots apocalípticos en contra de Humala que mostrarán la crisis económica venezolana que nos esperará si este resulta elegido).
Cualquiera sera el escenario, la voz cantante la tendrán los movimientos y frentes regionales. Quien articule sus expectativas, las organice y los convenza de que desde Lima hay alguien que las hará posibles, tendrá muchas posibilidades de ser el señor presidente 2011.
Enlaces de interés
CASTAÑEDA, EL CALETA - Desde el tercer piso
Luises - Menos Canas
9 comentarios:
Buen post, Arturo. Yo solo le agregaría algo, por qué tendemos a elegir nuestros candidatos bajo lógicas instrumentalistas. Será que, en el fondo, seguimos queriendo ver la política como medio para réditos personales ? Estoy totalmente de acuerdo contigo en que Castañeda no es el candidato conocido sino el candidato por conocer.
Gracias, Patty, por tu comentario. Es preciso estar alerta ante el candidato que se resiste a dialogar y que se refugia en los resultados. Ya vimos cómo nos fue antes con Honradez, Tecnología y Trabajo. Un abrazo,
Hasta el momento no tenemos candidatos fijos, solo son puras especulaciones. Pero yo no votaría por Castañeda pues tiene fama de uña larga. Sus obras no tiene cuando acabar y mucho menos sabemos cuanto nos van a costar. Keiko es una buena persona, pero no tiene eperiencia en el gobierno y la gente que la rodea es muy desagradable, por decir lo menos. Toledo me da mala espina. Tiene fama de jueguero y despilfarrador. Ademas no sabe controlar a su familia ni a su querida mujer. Lourdes, tampoco se ha rodeado de buena gente y dos derrotas consecutivas te dejan agotado y malhumorado sobre todo cuando la ultima ya la tenias ganada, pero se quemo en la puerta del horno. Bayly es un payaso, nada mas. Humala y su acercamiento a Chavez siguen rondando la cabeza de muchos. Solo atrasaria mas al pais. ahuyentaria la inversion y eso es lo que mas necesitamos. Arana, parece buena gente, pero su discursillo contra la minería no me gusta. Hay que cambiar cosas pero no sacarlas del pais de buenas a primeras. PPK tiene las ideas claras, piensa como gringo y seria buen presidente, pero tiene imagen de ricachon. Ojala el debate empiece pronto.
PPK tb me agrada pero le va a costar mucho calar en la gente. Pero no me sorprendería que el proximo presidente lo integre al gobierno (salvo si es Humala el elegido). Tb quiero que el debate empiece ya ya sino Bayly va a subir y si llega a un 10% eso demostraría que nuestros candidatos están pintados porque un conductor payaso les enmienda la plana y les coloca la agenda a seguir: hablar de él.
A Arana le falta punche mas frontal y cobertura de medios (primero lograr las firmas). Toledo debe lanzarse de una vez no sé qué espera. Ojala las fuerzas de centro en una eventual segunda vuelta de Keiko contra quien sea, impidan que esta salga elegida.
me da la impresion que semanalmente las preferencias se van diversificando.
Ojo me refiero a PPK en terminos de ejecutor, tecnócrata eficiente. Sin embargo, no veo que quiera realizar ajustes al programa economico para que la redistribucion sea mas justa o por ejemplo exigir a las mineras que no den propina sino que contribuyan en proporcion a sus ganancias.Eso si, creo que no lo toca.
PPK ha dicho que si no sale elegido se retira de la vida publica. Practicamente ha ocupado los mas altos cargos dentro de este pais, solo le falta ocupar el sillon de Pizarro, cosa poco probable mas no imposible, recordemos que Fujimori no figura en las encuestas ni siquiera tres meses antes de las elecciones del 90 y que Humala tenia 3% en octubre de 2005.
De verdad crees que en Castañeda vs. Humala....ganaria Humala???
Nada que ver...
En segunda vuelta humala perderia hasta con Jaime B....
Saludos
no sabia de las declaraciones de PPK. Ahora, el tiene un perfil de outsider al reves, no porque quiera tumbarse al sistema o sea un perfecto desconocido, sino porque no va a caer en la tentacion farandulera politica que hacen los demas (salvo que me equivoque y recurra al todo vale para ganar votos). Muy pocos o casi ninguno de los candidatos actuales podria sostener un debate contra PPK, pero a este señor tb le falta "calle" como se dice. (en el debate que hace años sostuvo contra Enrique Cornejo estuvo claro que PPK sabia más, pero Cornejo tuvo más floro, lamentablente, ello tb cuenta.
CRT:
si Humala llega a la 2da vuelta sera porque tiene un colchon de votos bien fuerte. Ambos llegarian fortalecidos. CAstañeda jalaria los votos de la derecha, apra y fujimorismo y de los nuevos independientes.Humala jalaria los del centro izquierda, izquierda y movs. regionales. Si se dan estas condiciones y Humala se desmarca de Chavez (error ojala aprendido) y capitaliza la alianza aprofujiderechista con CAstañeda, creo yo podría ganar.
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